¿Tienes diabetes y te preocupa la disfunción eréctil? En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre cómo la diabetes puede afectar tu vida sexual y qué medidas puedes tomar para prevenir o tratar la disfunción eréctil. Aprende sobre las causas, los síntomas, los tratamientos disponibles y los cambios en el estilo de vida que pueden ayudarte a mantener una vida sexual satisfactoria y saludable.
Diabetes y problemas de erección
La disfunción eréctil (o DE), definida como la incapacidad de mantener una erección suficiente para mantener relaciones sexuales, se considera un problema muy frecuente entre los hombres. Ahora sabemos que, por cada década de vida, aproximadamente un 10 % más de hombres padecen disfunción eréctil de leve a moderada (es decir, el 40 % de los hombres de 40 años, el 50 % de los hombres de 50 años, etc.).
Por su parte, la diabetes es una de las enfermedades más frecuentes en el mundo occidental. En España, esta enfermedad afecta a uno de cada siete adultos -la segunda tasa más alta de Europa-, según la Sociedad Española de Diabetes.
La diabetes puede tener muchas complicaciones y actualmente se considera que la disfunción eréctil es la complicación más importante y frecuente en los hombres. Sin embargo, hasta hace poco, la DE solía ser una de las complicaciones menos diagnosticadas, en parte por la reticencia natural de los pacientes a hablar de sus problemas sexuales con el médico y en parte por la idea errónea generalizada de que el deterioro de la función sexual era una consecuencia inevitable de la edad o de problemas emocionales.
La buena noticia es que la diabetes no tiene por qué ser un golpe fatal para la vida sexual de los diabéticos. Es posible proteger y mejorar la función sexual manteniendo la enfermedad bajo control e incluso en los casos en los que ya existe una disfunción, hay opciones de tratamiento eficaces.
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¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad metabólica que provoca la acumulación de altos niveles de azúcar (glucosa) en el torrente sanguíneo. En las personas sanas, la hormona insulina regula los niveles de azúcar en sangre al ayudar a que la glucosa del torrente sanguíneo entre en las células del organismo, donde se almacena o se utiliza como energía. Sin embargo, en las personas con diabetes, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo en lugar de entrar en las células.
Hay dos tipos principales de diabetes.
- La diabetes tipo 1 es una enfermedad autoinmunitaria que provoca la destrucción de las células beta del páncreas productoras de insulina. Sin suficientes células beta activas en el páncreas, el nivel de insulina para regular la glucosa en sangre es limitado. Aproximadamente el 10 % de los diabéticos padecen este tipo.
- La diabetes de tipo 2 se produce cuando las células se vuelven resistentes a la insulina que produce el páncreas, lo que provoca una acumulación de glucosa en la sangre. La obesidad y la falta de ejercicio físico son dos de las principales causas de la diabetes de tipo 2, y existe una relación directa entre el exceso de peso en la cintura, la resistencia a la insulina y su capacidad para regular los niveles de azúcar en sangre.
Estudios recientes han demostrado que los hombres con diabetes de tipo 1 tienen un mayor riesgo de desarrollar disfunción sexual, también disfunción eréctil y bajo deseo sexual, y que los daños en el mecanismo eréctil pueden ser algo más graves.
La relación entre la diabetes y la disfunción eréctil
Lograr una erección implica el correcto funcionamiento de muchos sistemas corporales diferentes, entre ellos el sistema nervioso, el endocrino, los músculos y el sistema cardiovascular. El cerebro interviene en la excitación sexual; cualquier estímulo sensorial (visual, olfativo, auditivo, gustativo) o cualquier sensación placentera viaja desde las zonas erógenas o desde el pene a lo largo de los nervios sensoriales hasta el cerebro. Las arterias transportan una gran cantidad de sangre al pene e inician el cambio físico del pene, también conocido como erección.
Por lo tanto, si hay un problema con alguno de estos sistemas de órganos, un hombre puede ser incapaz de lograr o mantener una erección. Asimismo, factores psicológicos como el estrés y la ansiedad pueden causar o empeorar el problema, ya que el cerebro desempeña un papel fundamental en el control de los sistemas corporales responsables de la erección.
Hoy en día se calcula que entre el 35 y el 75 % de los hombres diabéticos padecerán algún grado de disfunción eréctil a lo largo de su vida. Es probable que esto ocurra entre 10 y 15 años antes que en los hombres no diabéticos, y estas cifras aumentan a medida que los hombres envejecen.
En un estudio exhaustivo de 1000 hombres diabéticos (tanto de tipo 1 como de tipo 2), se descubrió que alrededor del 36 % de ellos padecían DE. Esto equivale a tres veces más que la prevalencia general de DE en hombres no diabéticos.
Es importante recordar que el desarrollo de la diabetes y su manifestación como disfunción eréctil es un proceso gradual que no sucede de la noche a la mañana, y que también es posible controlar la enfermedad para evitar la disfunción sexual o prevenir su progresión.
Causas de la disfunción eréctil en hombres con diabetes
Los estudios han identificado varias causas probables de DE en los hombres diabéticos. Entre ellas se incluyen:
- Daño en los vasos sanguíneos: un nivel alto de glucosa en el torrente sanguíneo a largo plazo puede dañar los vasos sanguíneos pequeños de diversos órganos, lo que podría provocar enfermedad renal, neuropatía diabética y pérdida de visión, entre otras cosas. Para lograr una erección, debe producirse un aumento del flujo sanguíneo en los cuerpos cavernosos, los tejidos eréctiles del pene, que atrapan la sangre en su interior. Sin embargo, cuando existe una enfermedad microvascular, el flujo sanguíneo del pene puede debilitarse y provocar disfunción eréctil. Los hombres con diabetes e hipertensión tienen un mayor riesgo de padecer DE debido al daño adicional a los pequeños vasos sanguíneos del pene.
- Daño a los nervios: los niveles altos de glucosa también pueden causar daño a los nervios, sobre todo en el sistema nervioso periférico, que actúa como conector entre el sistema nervioso central y el resto del cuerpo, incluidas las extremidades. Esta es la razón por la que los diabéticos padecen neuropatía periférica (daño de los nervios), que suele afectar a los pies y las piernas, y los hombres diabéticos suelen desarrollar daño en los nervios del pene. Esto puede manifestarse como disfunción eréctil, pérdida de sensibilidad, incapacidad para llegar al orgasmo, dolor y molestias durante las relaciones sexuales y otros problemas sexuales.
La diabetes daña los nervios del pene y del perineo, que son los responsables de transferir los impulsos sensoriales al cerebro, que a su vez inicia toda la respuesta sexual.
- Niveles bajos de testosterona: alrededor del 25 % de los hombres diabéticos tienen niveles bajos de testosterona en sangre. Esto se debe a que la insulina es capaz de estimular la producción de testosterona y su falta se relaciona con los niveles de testosterona. Esta hormona desempeña un papel fundamental en la función sexual masculina, por lo que unos niveles bajos de testosterona pueden manifestarse en disfunción eréctil, además de falta de erecciones matutinas y también libido baja, baja energía y estado de ánimo deprimido.
- Factores psicosexuales: el control de una enfermedad compleja como la diabetes puede ser difícil y, a menudo, provoca sentimientos como estrés, ansiedad, miedo, depresión, culpa e ira, los cuales se sabe que afectan las erecciones. La depresión, por ejemplo, puede provocar falta de sueño y, en consecuencia, pérdida de erecciones matutinas (algo natural en los hombres sanos). La ansiedad también puede hacer que los hombres tengan dificultades para lograr una erección o mantenerla durante el coito. Además, la disfunción sexual puede tener consecuencias mentales y emocionales que pueden llevar a una baja autoconfianza y autoestima. Un ejemplo podría ser un hombre diabético de unos 30 años que se siente presionado para dejar embarazada a su pareja. En estas situaciones, es posible obtener un apoyo más amplio tratando tanto el problema sexual como el psicológico, mediante psicoterapia o terapia sexual profesional.
- Efectos secundarios de los medicamentos: muchos hombres diabéticos reciben tratamiento con varios medicamentos para reducir las complicaciones de la enfermedad y el riesgo de desarrollar problemas cardiovasculares. Algunos de estos fármacos reducen la presión arterial y, a su vez, provocan disfunción eréctil, mientras que otros tienen efectos secundarios que también afectan la capacidad de lograr una erección.
¿Puede la diabetes causar otros problemas sexuales?
Alrededor de un tercio de los hombres con diabetes sufren una lesión nerviosa común que provoca la eyaculación retrógrada (a menudo denominada «orgasmo seco»), que constituye una de las principales causas de infertilidad masculina. En este caso, en lugar de eyacular a través del pene durante el orgasmo, el semen retrocede hasta la vejiga.
¿Cómo ocurre esto? La eyaculación «normal» implica una actividad autonómica compleja, pero debido al daño a los nervios asociado a la diabetes (que también puede producirse después de una cirugía de próstata y cuello de la vejiga), el músculo del cuello de la vejiga no se tensa correctamente. Como resultado, el esperma puede entrar en la vejiga en lugar de ser expulsado a través del pene. Aunque esta afección no hace que el sexo sea menos placentero, se necesitará ayuda médica para evitar la infertilidad.
Además, el daño a los nervios asociado a la diabetes puede provocar «eyaculación tardía», un trastorno que impide a los hombres alcanzar el orgasmo. En ocasiones, este síntoma se manifiesta antes que la disfunción eréctil y la forma de tratamiento se determinará tras una evaluación médica completa.
Los hombres diabéticos también deben buscar signos de hipoglucemia (nivel bajo de azúcar en sangre) después de mantener relaciones sexuales, ya que estas se consideran una forma de ejercicio físico.
Importancia de la prevención y el tratamiento adecuado
En conclusión, los hombres diabéticos pueden llevar una vida sexual placentera y satisfactoria, aunque es importante buscar tratamiento médico temprano para evitar un deterioro irreversible de su afección. Existen distintas opciones de tratamiento eficaces para la disfunción eréctil, desde medicamentos orales y dispositivos de vacío hasta inyecciones locales e implantes de pene.
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[Este artículo fue originalmente publicado en inglés en el blog de Vertica Labs.]
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