Ondas de choque o radiofrecuencia, ¿cómo ayudan en el tratamiento de la disfunción eréctil? ¿en qué se diferencian? ¡Sigue leyendo y entérate de todo!
La disfunción eréctil (o DE) es uno de los problemas de salud más frecuentes entre los hombres a partir de los 40 años. Tanto es así que hasta 1 de cada 3 hombres entre 60 y 70 años la presentan.
Los fármacos PDE5 (como la famosa Viagra) o los dispositivos de vacío son algunos de los tratamientos más populares para la disfunción eréctil, pero, aunque no son invasivos, tienen la gran desventaja de que requieren una planificación previa antes de tener relaciones, lo que conlleva la pérdida de la espontaneidad y, muchas veces, a relaciones menos satisfactorias. Las pastillas, además, pueden provocar importantes efectos secundarios, por lo que requieren de un estricto seguimiento médico.
La radiofrecuencia y las ondas de choque: nuevas opciones no invasivas
Para dar respuesta a esta necesidad de soluciones más naturales y sin efectos secundarios, en la última década se ha desarrollado toda una nueva línea de tratamientos mediante los cuales se aplica energía externa a los tejidos del pene para restablecer y rejuvenecer la función eréctil de una manera mucho más espontánea y natural.
La radiofrecuencia y las ondas de choque son en este momento las dos tecnologías principales de este nuevo concepto terapéutico, y en este artículo repasaremos todas las características y aplicaciones de esta terapias en el tratamiento de la disfunción eréctil, así como las principales diferencias entre ellas.
Revitalizando la intimidad: la radiofrecuencia en el tratamiento de la disfunción eréctil
¿Qué es la tecnología de radiofrecuencia?
Dentro de la Medicina, la radiofrecuencia se ha establecido firmemente en campos como la Dermatología, la Medicina Estética, la Cardiología y la Neurología, por mencionar algunos.
La radiofrecuencia (RF, también espectro de radiofrecuencia) consiste en la emisión de ondas electromagnéticas de la parte menos energética del espectro electromagnético.
En el caso del tratamiento de la disfunción eréctil, estas ondas electromagnéticas (ondas de radio) son capaces de liberar energía de baja frecuencia (1 MHz). Al liberarse, esta energía produce en la dermis un calor controlado que se aprovecha para estimular la producción de colágeno en los tejidos eréctiles del pene.
Hay que destacar que la terapia mediante radiofrecuencia para la disfunción eréctil es no invasiva e indolora.
Objetivo del tratamiento con radiofrecuencia
El tratamiento de la disfunción eréctil mediante radiofrecuencia tiene como fin restablecer el mecanismo biológico eréctil del pene utilizando la radiofrecuencia para estimular la producción de nuevas fibras de colágeno (colagenogénesis) en la túnica albugínea.
La túnica albugínea es un tejido del pene que desempeña un papel crucial en el mecanismo biológico de la erección. Está compuesta por numerosas fibras de colágeno (que le confieren elasticidad y rigidez) y está atravesada por venas encargadas de drenar la sangre de los cuerpos eréctiles. Durante la estimulación sexual, las fibras elásticas de colágeno permiten que la túnica albugínea se estire y comprima las venas que la atraviesan, de modo que la sangre no pueda salir a través de ellas desde los cuerpos eréctiles. De este modo, la túnica albugínea atrapa la sangre en los cuerpos eréctiles durante la actividad sexual para generar y mantener la erección.
Sin embargo, a partir de los 35-40 años, cuando las células producen menos colágeno en los tejidos, la cantidad y la calidad de las fibras de colágeno de la túnica albugínea empiezan a disminuir. El tejido pierde su elasticidad y rigidez y no puede estirarse y ensancharse durante la estimulación sexual como antes.
En consecuencia, la túnica albugínea es incapaz de bloquear eficazmente la salida de sangre de los cuerpos eréctiles y, por esta razón, los hombres suelen empezar a experimentar disfunción eréctil con el paso de la edad. Es la denominada disfunción eréctil por fuga venosa.
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¿Cómo se realiza el tratamiento de radiofrecuencia?
A día de hoy, la única forma de tratarse la disfunción eréctil con radiofrecuencia es utilizando Vertica®, un innovador dispositivo médico que ayuda a combatir la fuga venosa. Cabe destacar que es el primer producto de tipo que se lanza al mercado.
Las ondas de radio (la energía de radiofrecuencia) de Vertica® producen un calor controlado que estimula el crecimiento de nuevas fibras de colágeno en las capas profundas de los tejidos del pene, incluida la túnica albugínea. Las nuevas fibras de colágeno permiten que la túnica albugínea se estire eficazmente para retener la sangre dentro de los cuerpos eréctiles durante la actividad sexual, recuperando la rigidez y duración de las erecciones.
Una de las características principales de Vertica® es que está homologado para su uso doméstico y no requiere de prescripción médica.
El tratamiento se realiza aplicando el dispositivo a lo largo de la parte externa del pene. Vertica® también está diseñado para inducir la producción de colágeno desde la parte interna del pene calentando la zona del perineo mediante un accesorio (la almohadilla o PAD).
Protocolo de tratamiento con radiofrecuencia
El tratamiento inicial recomendado son 3 sesiones/semana durante el primer mes y 2 sesiones/semana a partir del segundo (la duración de cada sesión de tratamiento es de unos 15-30 minutos).
Una vez obtenida la recuperación deseada en las erecciones tras el tratamiento de choque inicial, el dispositivo puede seguir utilizándose según sea necesario, con el fin de fortalecer los tejidos eréctiles y mantener la integridad de las fibras de colágeno (como un «gimnasio» para el pene).
Con una vida útil de unos 10 años, Vertica® es un dispositivo personal que se puede conservar durante mucho tiempo si se utiliza y conserva correctamente.
Tasas de éxito de la radiofrecuencia
La radiofrecuencia de Vertica® ha demostrado ser eficaz en más del 85% de los casos de disfunción eréctil, como se ha demostrado en el primer estudio preliminar mundial de este tipo.
El estudio clínico, dirigido por el profesor Ilan Gruenwald de la clínica de neurourología del hospital Rambam (Israel), evaluó la seguridad, eficacia y satisfacción con el tratamiento de Vertica® en hombres con disfunción eréctil de leve a moderada, incluso en pacientes diabéticos (la diabetes es un factor de riesgo extra en la disfunción eréctil).
Además, los resultados mostraron que la mejora de la función eréctil se mantuvo durante un periodo adicional de 6 meses después de finalizado el tratamiento.
El valor añadido de la radiofrecuencia
El uso de la radiofrecuencia para la disfunción eréctil es un concepto terapéutico completamente novedoso que no se basa en la ingesta programada de una pastilla antes de la actividad sexual. Todo lo contrario, el paciente puede utilizar el dispositivo en cualquier momento, cómodamente en su casa.
Otro de los grandes beneficios de Vertica® es que se trata del único tratamiento del mundo que actúa restaurando el mecanismo eréctil natural (es decir, recuperando el mecanismo venooclusivo en los cuerpos eréctiles) para que el paciente pueda volver a disfrutar de erecciones espontáneas, tal y como eran antes.
Además, la mejora de la función eréctil es duradera, con efecto a largo plazo.
Muchos pacientes afirman que ya durante las primeras semanas de uso de Vertica® vuelven a experimentar erecciones nocturnas y matutinas espontáneas.
Las ondas de choque en el tratamiento de la disfunción eréctil
¿Qué es la terapia de ondas de choque?
Este tratamiento de la disfunción eréctil utiliza ondas acústicas/de choque para emitir pulsos suaves (ondas de choque de baja intensidad). Estos pulsos provocan microlesiones en las membranas celulares que, a su vez, inducen el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos (neovascularización) y mejoran el suministro de sangre a los tejidos del pene.
Las ondas de choque de baja intensidad conllevan:
- Mejora y estimulación de la circulación sanguínea.
- Aumento de la formación de nuevos vasos.
- Inducen a la relajación muscular.
- Eliminan los puntos dolorosos.
Esta terapia no se ideó para la disfunción eréctil, sino que se adaptó a ella al haber proporcionado beneficios en otras especialidades, como la cardiología o la traumatología.
Objetivo del tratamiento con ondas de choque
Al igual que los medicamentos orales y la mayoría de los demás tratamientos de la disfunción eréctil, la terapia de ondas de choque tiene como objetivo aumentar el flujo sanguíneo al pene. Sus efectos beneficiosos sobre la disfunción eréctil se basan en la capacidad angiogénica, es decir, que favorecen la formación de vasos.
En cambio, si se trata de una disfunción por fuga venosa, provocada por el deterioro de la túnica albugínea, las ondas de choque no van a dar buen resultado.
Así, las ondas de choque pueden no ser adecuadas para todos los pacientes, por lo que un médico cualificado debe evaluar primero la idoneidad y las tasas de éxito previstas.
¿Cómo se realiza el tratamiento con ondas de choque?
La terapia con ondas de choque se realiza en clínicas por personal médico especializado, a lo largo de una serie de 6 a 12 sesiones, aunque a veces se alarga un poco más. No requiere ingreso ni anestesia. La terapia consiste en aplicar ondas de choque en el cuerpo del pene durante varias sesiones para intentar mejorar la calidad vascular.
Las ondas de choque se aplican únicamente en la parte externa del pene, colocando el dispositivo de directamente sobre el órgano. Se aplican las ondas primero en la parte superior del pene, y después por debajo del escroto donde está la raíz de los cuerpos cavernosos
Existen diferentes tipos de dispositivos con distintos niveles de eficacia.
Protocolo de tratamiento con ondas de choque
La terapia con ondas de choque consiste en una serie de 12 sesiones de tratamiento que se dividen en 2 sesiones/semana durante las 3 primeras semanas; un periodo de descanso de 3 semanas; seguido de 2 tratamientos/semana durante las 3 semanas siguientes. La duración de cada sesión es de unos 15-20 minutos.
Cada dos meses se debe repetir el ciclo para mantener el efecto deseado.
Tasas de éxito de las ondas de choque
Según los estudios existentes, la tasa de respuestas positivas al tratamiento con ondas de choque está entre el 65-75%.
Existe discrepancia en las guías y sociedades médicas con respecto a la eficacia de las ondas de choque en el tratamiento de los problemas de erección. Aunque las guías clínicas europeas respaldan su utilización, la European Society of Sexual Medicine aún las considera en fase experimental.
Además, los pacientes no suelen notar un efecto preliminar hasta pasados 3 meses de tratamiento.
El valor añadido de las ondas de choque
El tratamiento con ondas de choque permite al paciente obtener erecciones espontáneas sin necesidad de programar el tratamiento antes de la actividad sexual.
Son un opción adecuada siempre que la disfunción eréctil esté causada por falta de aporte de sangre al pene por arteriosclerosis o estrechamiento de arterias. Como se ha comentado, si se trata de una disfunción eréctil por otras causas (como la fuga venosa), los resultados no van a ser los deseados.
Comparativa entre la radiofrecuencia y las ondas de choque en el tratamiento de la disfunción eréctil
Radiofrecuencia (RF) | Ondas de choque (OC) | |
La tecnología | Ondas de radio de baja frecuencia (1 MHz) | Ondas acústicas (de choque) de baja intensidad |
Mecanismo de acción | La energía térmica produce un calor controlado que estimula la síntesis de colágeno en el tejido de la túnica albugínea (el mecanismo eréctil), lo que le permite bloquear eficazmente la sangre en el pene durante las erecciones. | Las ondas de choque provocan microlesiones en las membranas celulares que, a su vez, inducen el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos y mejoran el suministro de sangre a los tejidos del pene. |
Objetivo del tratamiento | Restablecer el mecanismo biológico eréctil para permitir erecciones espontáneas. | Mejorar el flujo sanguíneo al pene y permitir erecciones espontáneas naturales. |
¿Cómo se realiza el tratamiento? | En casa, mediante el uso de Vertica, un dispositivo de uso doméstico diseñado para que el paciente lo utilice por sí mismo a su conveniencia. | En clínica, por profesionales. Es necesario realizar una serie de tratamientos cada dos meses para mantener el efecto. |
Protocolo de tratamiento | Tres tratamientos/semana durante el primer mes y 2 tratamientos/semana a partir del segundo. Es posible seguir utilizando el dispositivo, según sea necesario, para prevenir y fortalecer aún más el mecanismo eréctil (como un «gimnasio» para el pene). | Dos tratamientos/semana durante las 3 primeras semanas; un periodo de descanso de 3 semanas; y 2 tratamientos/semana durante las 3 semanas siguientes. |
Tasas de éxito del tratamiento | - Más del 85 % - Los pacientes comunican erecciones nocturnas y matutinas espontáneas ya durante las primeras semanas de tratamiento - La mejora de la función eréctil se mantiene durante al menos 6 meses tras la finalización del tratamiento, como muestran los resultados de un ensayo clínico. | - 65-75 % - El efecto se observa al cabo de unos 3 meses |
En resumen, tanto la radiofrecuencia como las ondas de choque son opciones terapéuticas interesantes, cada una con sus propias ventajas y consideraciones.
Ambas tecnologías representan un paso adelante en la búsqueda de soluciones más eficaces y menos invasivas para un problema de salud que afecta a muchos hombres.
Vertica, radiofrecuencia para la fuga venosa
Como hemos explicado, Vertica® es un nuevo tratamiento médico para la disfunción eréctil, sobre todo la que surge con la edad, que utiliza tecnología de radiofrecuencia para restaurar y rejuvenecer los tejidos responsables de las erecciones. Sin dolor, sin efectos secundarios.
A diferencia de otras soluciones, Vertica® actúa en profundidad sobre un aspecto poco tratado hasta el momento: la disfunción eréctil por fuga venosa, que provoca erecciones cortas o insuficientes para alcanzar el disfrute de una relación sexual plena.
Vertica® ha sido concebido para ayudar a los hombres con dificultades en su erección que desean mejorarla de manera natural, además de para aquellos que quieran prevenir la disfunción eréctil asociada al paso del tiempo, antes de que aparezcan.
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