La relación entre el ciclismo y la disfunción eréctil es un tema que preocupa a los practicantes de este deporte, en muchos casos hombres, y existe mucha controversia sobre si la bicicleta puede afectar negativamente a la función sexual.
Con el objetivo de salir de dudas, en este artículo vamos a repasar los hallazgos de las investigaciones más recientes sobre disfunción eréctil y ciclismo. ¡Sigue leyendo!
Ciclismo y disfunción eréctil
El ciclismo es un deporte con muchos beneficios para la salud: además de ser un medio de transporte sostenible y respetuoso con el medio ambiente, también mejora la forma física aeróbica, favorece la salud del corazón, fortalece los músculos de las piernas e incluso ayuda a quemar esas calorías de más.
A pesar de todos estos beneficios, y según distintos estudios, resulta que cuando los ciclistas hombres pasan demasiado tiempo sobre un sillín rígido sin las precauciones adecuadas, existe cierto riesgo de que aparezca la temida disfunción eréctil (DE).
Ya el antiguo médico griego Hipócrates afirmaba que las constantes sacudidas sobre el lomo del caballo deterioraba el perineo del jinete y sus erecciones y, por tanto, su capacidad para el coito.
¿Por qué el ciclismo puede provocar disfunción eréctil?
Una de las teorías es que el uso prolongado de la bicicleta ejerce una presión sobre el nervio pudendo, que es el que transmite las señales entre los genitales y el cerebro.
Cuando se está sentado en un sillín de bicicleta rígido y estrecho durante largos periodos de tiempo, la compresión del nervio puede interferir en la comunicación entre el cerebro y los genitales y provocar una disminución de la sensibilidad y, en ocasiones, disfunción eréctil. Así lo expresa el Departamento de Salud de los Estados Unidos (NIH).
Varios estudios realizados en la década de los noventa con ciclistas de larga distancia mostraron que el ciclismo produce efectos negativos sobre la función sexual.
También se ha descrito relación entre ciclismo y Síndrome del Ciclista (o del canal de Alcock).
Otra teoría es que la presión persistente sobre el perineo provoca temporalmente una disminución del suministro de sangre y oxígeno al pene que, con el tiempo, podría provocar DE.
En algunas (y raras) ocasiones, una lesión en el perineo puede dañar un vaso sanguíneo del pene y provocar una erección parcial persistente (durante horas o días). Esta afección se llama priapismo y requiere tratamiento médico inmediato. Uno de los riesgos asociados al priapismo es también la aparición de la disfunción eréctil.
Asimismo, distintos estudios observacionales han indicado una prevalencia relativamente alta de disfunción eréctil entre los ciclistas de élite, que informaban de la sensación de entumecimiento del pene tras practicar ciclismo de manera prolongada. El adormilamiento o el dolor en la zona perineal son situaciones comunes que se repiten en muchos amantes de este deporte.
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¿Qué dice la ciencia?
La relación entre la disfunción eréctil y el ciclismo quedó demostrada en el estudio fundamental Massachusetts Male Aging Study (MMAS, Estudio del envejecimiento varonil en Massachusetts). Esta investigación se basó en una encuesta realizada a 1.709 hombres de edades comprendidas entre los 40 y los 70 años, entre los que había una gran variedad de ciclistas («ciclistas recreativos», «ciclistas ocasionales», «ciclistas estacionarios» y «ciclistas deportivos»). Este estudio es único entre los realizados en relación con el ciclismo y la disfunción eréctil, y al ser una muestra bastante grande, permite generalizar los resultados a toda la población de ciclistas.
Uno de los principales hallazgos del estudio MMAS fue la diferenciación entre la práctica del ciclismo moderado (hasta 3 horas a la semana) y el ciclismo deportivo (es decir, más de 3 horas a la semana) y el desarrollo de disfunción eréctil.
¿Por qué se puso la línea en 3 horas? Porque 3 horas semanales es el tiempo típico de uso de la bicicleta de los ciclistas moderados (ocasionales o recreativos) en un gimnasio o de las personas que se desplazan diariamente en bicicleta al trabajo.
Bicicleta, sí, ma non troppo
Los resultados del estudio mostraron que los hombres que montaban en bicicleta 3 horas semanales o más (los practicantes de ciclismo más deportivo) son los que corrían más riesgo de desarrollar algún grado de disfunción eréctil.
Sin embargo, la mayor sorpresa fue el hallazgo de que en los hombres que practicaban ciclismo menos de 3 horas semanales o sólo ocasionalmente, el ciclismo se asociaba por el contrario a la prevención del desarrollo de disfunción eréctil.
Estos resultados validan la importancia del ejercicio para el buen estado físico, incluido el ciclismo, ya que se observó que los ciclistas moderados tenían un menor riesgo de desarrollar disfunción eréctil que los hombres que no practican ciclismo en absoluto, mientras que los ciclistas deportivos tenían más probabilidades de padecer DE moderada o completa.
Los resultados del MMAS fueron respaldados además por un reciente estudio de revisión sistemática y metanálisis (2021), que evaluó los resultados de otros 6 estudios de investigación que incluyeron a 3.330 ciclistas y 1.524 no ciclistas como controles.
La importancia del sillín y la postura
Muchas de las investigaciones citadas apuntan como factores diferenciales a la posición del ciclista en el sillín y a las características de éste.
Estas son algunas precauciones sencillas para reducir el riesgo de DE al montar en bicicleta:
- Utiliza un sillín relativamente más ancho con acolchado adicional (esponja o gel) para apoyar el perineo.
- Asegúrate de que el sillín de la bicicleta está a la altura correcta. Si las piernas están totalmente extendidas al pedalear, entonces se debe ajustar el asiento, ya que las piernas totalmente extendidas ejercen más presión sobre los genitales.
- Considera la posibilidad de bajar el manillar, ya que inclinarse hacia delante puede aliviar la presión sobre el perineo.
- Utiliza pantalones cortos acolchados para una mayor protección del perineo y los genitales.
- En los trayectos más largos, se recomienda hacer descansos regulares, modificar de vez en cuando la posición sobre la bicicleta y circular de pie periódicamente.
- Reducir la intensidad del entrenamiento: menos horas por cada sesión de ciclismo.
- En caso de pérdida de sensibilidad, entumecimiento u hormigueo en el pene, se recomienda dejar de montar en bicicleta hasta que mejoren los síntomas y consultar a un médico.
Bicicleta y disfunción eréctil: recomendaciones
En conclusión, es importante tener en cuenta que, en general, el ciclismo tiene enormes beneficios para la salud, sobre todo teniendo en cuenta la epidemia mundial de obesidad, que aumenta el riesgo de cardiopatías y también de disfunción eréctil asociada.
Por lo tanto, los hombres no tienen por qué renunciar a la bicicleta, sino que se deben tomar las precauciones necesarias, sobre todo cuando se vayan a realizar salidas de ciclismo intensas y prolongadas.
Además, si ya padeces disfunción eréctil y utilizas la bicicleta, es muy posible que el ciclismo no sea necesariamente la causa principal, es importante tener en cuenta otras posibles causas de la DE, como cardiopatías, problemas nerviosos, toma de antidepresivos o diabetes.
Por lo tanto, si los problemas de erección persisten, siempre hay que buscar un diagnóstico profesional.
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